CAPITULO XIII - Los Católico-Romanos

TERRENOS COMUNES

Como creyentes, hay algunas doctrinas que tenemos en común (al menos en parte) con los Católico-Romanos. No obstante, las doctrinas Católico-Romanas varían de década en década, y de país en país.

A continuación damos algunas doctrinas que Ud. puede usar para establecer un entendimiento mutuo con el oyente Católico-Romano:

1. La Biblia es la Palabra de Dios (aunque ellos la interpreten mediante los dictámenes de Papa y la Tradición de ellos).

2. Jesucristo es Dios (aunque ellos elevan al Papa y María a alturas de gloria que pertenecen solamente a Cristo Jesús).

3. El hombre necesita un Salvador (aunque ellos no creen que Jesús solamente puede salvar al hombre mediante la fe del hombre en el pago que Jesucristo efectuara por sus pecados en la cruz).

4. Hay un cielo y un infierno (aunque ellos también creen en el Limbo y el Purgatorio, los cuales no son enseñados en las Escrituras . . . y ellos no enseñan que la diferencia entre ir al cielo o al infierno es la FE).

GRACIA y OBRAS.

El tema principal de debate, diríamos el tema de debate constante al testificarles a los Católico-Romanos es gracia y obras. La Iglesia de ellos ha establecido miríadas de ritos, ceremonias, y reglamentos que sus súbditos (y usamos esta palabra deliberadamente) deben seguir, si ellos han de tener alguna esperanza de alcanzar el cielo algún día—quizás aun siglos después que mueran. Es asombroso comprobar que cuando un grupo religioso falla en cuanto a la comprensión de gracia y obras, casi todas las demás doctrinas en que ellos se apoyan están afectadas por el mismo error. Como Dios dice en Gálatas 5:9, "Un poco de levadura leuda toda la masa."

Habrá momentos, al testificarle a un Católico Romano en que Ud. pensará que al fin ha logrado HACERLE COMPRENDER el plan de la salvación a esa persona. Pero entonces dicho oyente le formulará una pregunta o hará un comentario que inmediatamente le revelará a Ud. que él realmente no entiende que la salvación es por fe y no por obras.

La razón por qué el oyente mencionado no entiende el evangelio se debe a que desde su niñez, le han inculcado enseñanza tras enseñanza, de que la salvación no es por fe solamente, y que muchas otras cosas, aparte de la fe, se requieren de la persona que desea ir al cielo.

El error se infiltra por todos lados, y a veces las razones detrás de las doctrinas son bien sutiles — sutiles con la astucia y la maldad de Satanás. Y nosotros nuevamente le advertimos al ganador de almas, así como Pablo advirtió a los que estaban a su cuidado, "Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. "Y, "Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, Y NO SEGUN CRISTO" (II Corintios 11:3 y Colosenses 2:8).

Los Católicos aseveran estentórea menté que la Iglesia fue edificada sobre el apóstol Pedro . . la adoración de los santos . . . la exaltación de María . . . si Cristo tenía hermanos . . . la confesión al sacerdote . . el rosario . . . ¡UNO PODRIA DISCUTIR DIA Y NOCHE CON UN CATOLICO ACERCA DE ESTAS COSAS Y NO LLEGAR A GUIARLO NUNCA AL CONOCIMIENTO DE CRISTO COMO SU SALVADOR PERSONAL!

Si Ud. ha nacido de nuevo, Ud. tiene el Espíritu Santo morando en su interior e iluminando su mente con un claro entendimiento de las Es­crituras acerca de todas estas cosas . . Pero la persona que ha sido criada en la iglesia Católica probablemente NO es nacida de nuevo, y por tanto NO tiene el beneficio del Espíritu Santo enseñándole los DE­TALLES importantes en la Palabra de Dios.

¿De qué está el Espíritu Santo activamente convenciendo al mundo? Juan 16:8-11 nos enseña que el Espíritu Santo está convenciendo al mundo de pecado, de que carecen de justicia, de que el juicio se acerca. ¿Y por qué están siendo convencidos de pecado? Porque ellos (el mundo) NO CREEN en Cristo como su Salvador (Juan 16:9).

Si Ud. quiere realizar su tarea de testificar en COOPERACION con lo que el Espíritu Santo está tratando de hacer en las vidas de los incrédulos . . . hable acerca del EVANGELIO . . . de cómo una persona puede ser salva . . . que la salvación es un regalo de Dios que se recibe por fe . . . ¡Y deje las DE MAS PREGUNTAS para contestarlas (tanto como sea posible) DES PUES que la persona sea salva!

JESUCRISTO PAGO POR TODOS LOS PECADOS

En la doctrina que enseñan los Católico-Romanos, el pecado está departa mentalizado. Hay el pecado venial que el Catecismo No. 3 de Baltimore define de esta manera: "¿Qué es el pecado venial? El pecado venial es una ofensa de menor seriedad contra la ley de Dios, que no priva al alma de la gracia santificadora, y que puede ser perdonado aun sin la confesión sacramental."

En la doctrina Católica también hay el pecado mortal. "¿Qué es el pecado mortal? El pecado mortal es una grave ofensa contra la ley de Dios. ¿Por qué este pecado se llama mortal? Este pecado es llamado mortal porque priva al pecador de la gracia santificadora, la vida sobrenatural del alma. Además de privar al pecador de la gracia santifi­cadora, ¿que más hace al alma el pecado mortal? Además de privar al pecador de la gracia santificadora, el pecado mortal hace del alma un enemigo de Dios, le quita el mérito de todas las buenas acciones, le priva del derecho a la felicidad eterna en el cielo, y la hace merecedora del castigo eterno en el infierno."

La iglesia Católica también reconoce el pecado de Adán. Es decir, el pecado o la naturaleza pecaminosa que el hombre hereda de Adán. Es por el pecado de Adán que Cristo supuestamente murió. Ud. debe mostrarle al Católico que Cristo Jesús ha pagado completamente el precio total de todo su pecado.

Primero, muéstrele en las Escrituras que todo pecado es mortal, o letal (Santiago 2:10; Romanos 6:23). Segundo, use las Escrituras para mostrar que todo pecado—no importa cómo lo clasifiquemos—ha sido pagado por Cristo (Hebreos 1:3; 1 Pedro 2:24; 3:18; 1 Juan 2:2).

"Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados, y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree" (Hechos 13.38, 39).

Aun guardando los mandamientos no podría "justificarnos de todas las cosas." En primer lugar, nadie los ha cumplido. En segundo lugar, cumplir con los mandamientos no podría hacernos perfectos. Hebreos 7:19 dice, "(pues nada perfeccionó la ley), y de la introducción de una mejor esperanza (Jesucristo, v. 22), por la cual nos acercamos a Dios."

JESUS es el único camino al cielo. "Jesús le dijo: yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí" (Juan 14:6). La salvación no está en una iglesia. No está en la iglesia Mormona. No está en la iglesia Protestante. No está en la iglesia Católico-Romana. La salvación está en una Persona. La salvación está en Jesús. "Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo" (Juan 1:17).

¿COMO PODEMOS SER LIMPIADOS DEL PECADO?

Cuando un Católico Romano comete pecado, se supone que debe hacer varias cosas:

1. Ir a un sacerdote y confesarle su pecado.

2. Recibir del sacerdote la penitencia que debe hacer, e ir a su hogar y hacerla (lo cual a menudo consiste en recitar cierto número de "Rosarios," "Padrenuestros," etc.)

3. Ira misa.

4. Ocuparse en arreglar que un número de personas rece por su alma después que muera, para que su alma pueda ser librada del Purga­torio a tiempo.

A la persona que haya recibido al Señor Jesucristo como Salvador personal, Dios le dice de sus pecados: "Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la in circuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos TODOS LOS PECADOS, anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz" (Colosenses 2:13, 14).

El Cristiano no necesita otra ofrenda (misa) por sus pecados. "Porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados" (hechos puros y santos), (Hebreos 10:14). "Pues donde hay remisión de éstos, NO HAY MAS OFRENDA POR EL PECADO" (Hebreos 10:18).

El Católico Romano está perennemente tratando de crucificar DE NUEVO a Cristo . . . todo en vano. La UNICA muerte de Cristo en la cruz, pagó por TODOS los pecados, de TODAS las personas, de TODAS las épocas, y para TODOS los que quieran recibir dicho pago por medio de la fe.

CUANDO EL SACERDOTE OFRECE EL SACRIFICIO DE LA MISA

"Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que NUNCA pueden quitar los pecados"(Hebreos 10:1 I ).

De todas las cosas que el Católico pudiera imaginar que el sacrificio de la misa puede hacer por él, UNA cosa sabemos que NO PUEDE HACER, ¡el sacrificio de la misa NO PUEDE QUITAR LOS PECADOS!

Es la voluntad de Dios que el sacrificio de Cristo pagara por todos los pecados y que todos aquellos que recibieran dicho pago fueran hechos puros y santos a la vista de Dios para siempre. "En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre" (Hebreos 10:10).

La iglesia Católica enseña que la misa es el sacrificio de Cristo OTRA VEZ por los pecados. Pero Romanos 6:9 dice, "SABIENDO que Cristo, habiendo resucitado de los muertos. YA NO MUERE. . ."

El problema con el Católico es que él realmente no cree que Cristo pagó por TODOS sus pecados. Sin embargo, la Biblia es bien explícita, "Quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de TODA iniquidad . . ." (Tito 2:14).

Es por esto que es un problema de gracia y obras. Dios dice que la salvación es por gracia. El Católico no niega esto. Pero al mismo tiempo él cree que debe seguir los rituales y reglamentos para hacer que esta gracia de Dios sea efectiva a favor suyo. Y esto no es Escritural. ¿Qué verso muestra que si la salvación es por gracia, entonces no puede ser también por obras? Esperamos que Ud. haya dicho, "Romanos 11:6."

¿Se da cuenta Ud. que lo que el Católico necesita más, entonces, es que Ud. repase el plan de la salvación junto con él, en forma simple y con las Escrituras, mostrándole que LA BIBLIA dice que la salvación es "por gracia, por medio de la fe"? Podría llevarle un largo rato hasta que "la luz lo ilumine." Pero tenga paciencia. Y recuerde que sus padres, sus maestros, su sacerdote, y aun el Papa, le han estado enseñando lo contrario a la Palabra de Dios en cuanto a este tema de la salvación, durante toda su vida.

Es solamente cuando el Católico demuestre REALMENTE preocupación por alguna otra pregunta cuando Ud. deberá dedicar el tiempo que sea necesario a otro asunto que no sea la salvación misma, o dejar la explicación para más tarde, para cuando él sea salvo.

Pero para su propia información, a continuación enunciamos al­gunos errores en la teología Católico-Romana, y la correcta enseñanza de las Escrituras:

1. El Católico Romano adora a Cristo, pero le adora en vano. "Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hom­bres" (Mateo 15:9). Ver también Gálatas 5:1-4.

2. Enseñan que Pedro fue el primer Papa, y que los Papas deben ejercer autoridad sobre los feligreses. Sin embargo, esto es contrario a lo que Pedro mismo expresa en las Escrituras. "Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos (y no un Papa, pero un anciano entre muchos), y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: APACENTAD la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, NO POR FUERZA, sino voluntariamente; NO POR GANANCIA DESHONESTA, sino con ánimo pronto; NO COMO TENIENDO SEÑORIO sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey" (I Pedro 5:1-3).

La Biblia en ningún lado enseña que el líder espiritual de la grey debe ser el "jefe." El líder debe demostrar un liderazgo positivo, sí, pero no debe tratar de desempeñar el papel de "Dios" en las vidas de las personas. Las Escrituras están repletas de evidencia que el verdadero líder espiritual es un SIERVO de la gente, en vez de ser una especie de "patrón."

"Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como VUESTROS SIERVOS por amor de Jesús" (II Corintios 4:5).

Jesús tuvo mucho que decir con respecto a esto. "Mas Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad. Pero NO será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro SERVIDOR, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos. Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos" (Marcos 10:42-45).

Si Ud. estudia mucho de la historia de la Iglesia Católico-Romana y el

Papado, verá la magnitud del error de ellos en ejercer "señorío" sobre la grey.

Mateo 23:9 dice, "Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos." Los Católicos cometen una gran equivocación al exigir reverencia, de parte de los hombres. Solamente Dios debiera ser adorado. Cualquier otra adoración se constituye en una idolatría.

La veneración a la virgen María y los "Santos." Con respecto a María, las Escrituras nos dicen, "¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres" (Lucas 1:28). María era una mujer admirable y piadosa. Pero María, como todos los demás, era aún pecadora (Romanos 3:23). Ella misma reconoció a Dios como su SALVADOR, "Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Seffir; y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador" (Lucas 1:46, 47). La per­sona que no es pecadora, no necesita la salvación, y por lo tanto, no tiene un Salvador.

Las Escrituras enseñan que todos los creyentes son santos. La palabra tiene el significado de "puros y santos." Todos los que han recibido al Señor Jesucristo como Salvador personal son "puros y santos" por medio de la justificación que Dios les otorga (I Corintios 1:30; II Corintios 5:21, etc.). Los apóstoles se refirieron a todo el grupo de Cris­tianos como "santos" (Efesios 1:1, 1 Corintios 1:1; Filipenses 1:1, etc.), y no sólo a aquellos de un grupo selecto.

Es Dios que hace santo a una persona, y no el hombre. Dios destaca a la persona como santo, y no el hombre. Dios establece las condiciones para ser un santo, y no el hombre . . . y tampoco la Iglesia Católica Romana.

El Papa, el sacerdote, María, los santos . . . ninguno de ellos puede mediar entre Dios y el hombre. "Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, JESUCRISTO HOMBRE"(I Timoteo 2:5). Al creyente se le invita a venir directamente al Señor, mediante Jesús, en-tiempo de necesidad.

"Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. ACERQUEMONOS, pues, CONFIADAMENTE AL TRONO DE LA GRACIA, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro" (Hebreos 4:14-16).

"Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo POR LA SANGRE DE JESUCRISTO, por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne" (Hebreos 10:19, 20).

"Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada a esta gracia en la cual estamos firmes . ." (Romanos 5:1, 2).

¿A quién debiéramos confesar nuestros pecados? La Iglesia Católica dice que debemos confesarlos a un sacerdote. La Biblia dice que solamente Dios puede perdonar pecados, y que nosotros debiéramos confesar nuestros pecados a Jesús, porque EL es nuestro abogado—EL es nuestro intercesor.

"Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad . . . y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo" (I Juan 1:9 y 2:1). Nuestro abogado no es María, o el sacerdote de ninguna iglesia . . . ¡Nuestro abogado es Jesús!

La. Biblia no menciona absolutamente nada del Purgatorio. No hay otro "lugar de limpieza" aparte de la sangre de Jesucristo. En I Juan 1:7 leemos, ". . . la SANGRE DE JESUCRISTO su Hijo nos limpia de TODO pecado."

Una de las cosas que hizo que Martín Lutero hablara en contra de la Iglesia Católico-Romana y sus prácticas con respecto a la venta de indulgencias, fue observaciones tales como, "Al momento que Ud. oiga que el dinero cae en la caja, el alma de su madre saltará fuera del purgatorio," por Tetzel, un Fraile de la Orden Dominicana (citado de La Iglesia en la Historia, por B. K. Kuiper, p. 160).

(Las indulgencias se vendían a la gente que iba al sacerdote para cumplir con la penitencia, y quienes preferían pagar una suma de dinero a la iglesia en vez de hacer alguna otra clase de penitencia o compensa­ción por sus pecados. Con el correr del tiempo, las indulgencias también se vendieron a los que estaban tratando de ayudar al alma de algún difunto para que fuese del purgatorio al cielo. La gente descubrió que era más fácil pagar una suma de dinero por el alma de un ser querido que pasarse el tiempo que de otra manera les era requerido para orar por ellos. Este sistema agradó mucho a la iglesia, puesto que les proporcionaba una fuente de ingresos asombrosamente lucrativa. Se dice que la Catedral de San Pedro en Roma fue construida mediante la venta de estas indulgencias.)

¡Este concepto en su totalidad está en completo desacuerdo con las Escrituras! "SABIENDO que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la SANGRE PRECIOSA de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación" (I Pedro 1:18, 19).

"Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el DON DE DIOS se obtiene con dinero" (Hechos 8:20).

No está dentro de la capacidad de los seres humanos ayudar de ninguna manera en la redención de alguna otra persona. (El hombre ni siquiera puede redimir su propia alma, si vamos al caso.)

"Ninguno de ellos podrá en manera alguna redimir al hermano, ni dar a Dios su rescate" (Salmo 49:7).

"El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo . . ."(Ezequiel 18:20).

La Biblia enseña que si una persona está perdida, va al infierno. Y si una persona es salva, va a estar con el Señor en el Cielo. No hay tal cosa como el purgatorio. ". . . de partir y estar con Cristo . . ." (Filipenses 1:23). "Pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y PRESENTES AL SEÑOR" (II Corintios 5:8). "Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, EN LOS CIELOS" (11 Corintios 5:1).

Una vez que la persona ha recibido a Cristo como Salvador personal, no tiene que preocuparse en absoluto en cuanto a ser condenada por sus pecados . . . Quizás castigada en la tierra, y sin mucho galardón en el cielo, sí . . . Pero condenada al purgatorio por un tiempo, o al infierno por la eternidad . . . ¡Jamás!

"De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene VIDA ETERNA; y NO vendrá a condenación, mas ha PASADO de muerte a vida" (Juan 5:24).

Si un lugar como el purgatorio en realidad existe, entonces Jesucristo ciertamente lo omitió en SUS declaraciones, porque EL le dijo al ladrón en la cruz; "De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23:43). Y si el ladrón fue al purgatorio, entonces Jesús era un mentiroso.

8. Los Católicos dicen que María permaneció virgen toda su vida, y que Cristo no tuvo hermanos y hermanas de carne y sangre. (En cierto sentido, Jesús sí tuvo medio hermanos y hermanas, puesto que José no era el padre del Señor Jesucristo). "¿No es éste el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? (Marcos 6:3).

9. "Prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos . . ." ¿Es esta doctrina de la Iglesia Católica sacada de la Biblia ... dada por el Señor?

"Pero el Espíritu dice claramente que. en los .postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus ENGAÑADORES y, a doctrinas de DEMONIOS; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad" (I Ti moteo 4:1-4).

"Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo" (Colosenses 2:16). "Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, entre­metiéndose en lo que no ha visto, vanamente hinchado por su propia ¡Tiente carnal . . ." (Colosenses 2:18).

"Pues si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿POR QUE, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos tales como: No manejes, ni gustes, ní aun toques (en conformi­dad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso? Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne" (Colosenses 2:20-23).

La Biblia Anotada de Scofield dice lo siguiente con respecto a este verso, ( versión inglesa ) "Las cuales en realidad no honran a Dios, sino solamente satis­facen la carne" (es decir, creando una reputación de santidad superior).

El sistema católico de la veneración auto impuesta, y la auto humilla­ción y degradación, pensando que de alguna manera agrada a Dios, en realidad, es contrario a las Escrituras, por la misma razón en que la lógica humana a menudo lo es.

En Mateo 9:13, Cristo dice, ". MISERICORDIA quiero, y NO SACRIFICIO. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento" (a que cambien de criterio).

Es el sacrificio de Cristo lo que Dios mira para nuestra salvación, y no algún sacrificio que nosotros pudiéramos hacer por EL. No obstante esto, después que somos salvos, se nos invita a servir al Señor—pero este es nuestro culto—o servicio—RACIONAL, en vez de un sacrificio. Esto es para beneficio nuestro—para ahora y también para después.

10. La Iglesia Católica enseña que la "verdadera iglesia" (la iglesia de ellos) está edificada sobre Pedro, y usan Mateo 16:18 como la base textual de esta declaración.

Al examinar este pasaje de Mateo 16, sin embargo, nosotros no encontramos esta enseñanza en absoluto. Los versos 13 al 16 registran que Jesús pregunta a sus discípulos, "¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?" Y Simón Pedro le da la respuesta correcta, "Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente." Pedro sabía que Cristo era Dios . . . el Hijo de Dios.

En el verso 17 Jesús le dice, "Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos." Jesús está diciendo que mientras EL es el Hijo de Dios, Pedro es hijo de hombre.

En el v.18 Jesús dice: "Y yo también te digo, que tú eres Pedro (petros), y sobre esta roca (Petra) edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella." Jesús está diciendo, "Pedro, tú eres una piedrecilla. Y sobre esta gran Roca, ESTA PEÑA ENORME (Cristo) edificaré mi iglesia."

I Corintios 3:11, "Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es JESUCRISTO"—y no Pedro. Jesús es el fundamento sobre el cual está edificada la verdadera Iglesia.

Efesios 2:20, "Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la PRINCIPAL PIEDRA DEL ANGULO JESU­CRISTO MISMO."

Aun el mismo Pedro habla de los creyentes como "piedras," pero de Cristo como la "PRINCIPAL PIEDRA DEL ANGULO" (I Pedro 2:4-­8). Ver también Hechos 4:11.

11. La Iglesia Católica enseña que el bautismo por agua es necesario para la salvación. Sírvase referirse al Capítulo Nueve para más detalles del bautismo.

Como mencionáramos anteriormente, los once puntos explicados raramente o casi nunca, debieran traerse a colación durante la presenta­ción que Ud. haga del evangelio a un Católico Romano. Si Ud. piensa que por alguna razón es imperativo que Ud. mencione algo en cuanto a dichos puntos, sírvase hacerlo con genuino amor y paciencia. Recuerde que la persona a quien Ud. está testificando no inventó estas doctrinas. Por lo general, dicho oyente cree en ellas simplemente porque eso es lo que le han enseñado, y él no ha escudriñado las Escrituras por sí solo, para "ver si las cosas son así."

Si Ud. realmente quiere ganar Católicos (u otras personas, en lo que esto respecta) para el Señor . . . persevere con el evangelio y los versos simples que hacen del plan de la salvación algo claro y comprensible a los perdidos, tales como Juan 3:16, Efesios 2:8,9, Hechos 16:31, etc.

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